“The Human Equation”

Ayreon

Icarus Music – 2004

 

A estas alturas es casi redundante decir que el holandés Arjen A. Lucassen es un increíble y prolífico músico, compositor, artista;  creador de tan diversos proyectos como Ayreon, Ambeon, Vengeance, por citar algunos.

Nos ocupa el último trabajo de su alter ego, Ayreon, un proyecto bajo el cual Arjen convoca a gran cantidad de músicos, cantantes y demás, para darle forma a sus trabajos de ciencia ficción de la cual es fanático, con sonidos de hard progresivo sinfónico.

Pero esta vez, no hay (o casi) ficción, (al menos inicialmente), sino que Lucassen nos  propone un viaje al interior del ser humano, y para hacerlo la historia de “The Human Equation” (La ecuación humana) arranca en un accidente automovilístico del protagonista, el cual entra en estado de coma, a partir de allí su mente empieza a recorrer su vida previa, o a plantear posibilidades como por ejemplo si realmente fue un accidente, y pasar por diversos estados imaginarios.

Para ello se explaya en dos discos impactantes de buena música, en la que sin dudas es la mejor obra de Ayreon, incorporando sonidos: folk en “Voices” , en “Pain” o “Pride” (incluso con flautas alla “Jethro Tull”), aires de música celta en “Sing”,  pasajes climáticos (alla “Porcupine Tree”) en “Mystery” o en “Accident?” (por cierto ¡que parecido canta Devon Graves al gran David Bowie!), pasajes sinfónicos en “School”, e inclusive colores aportados por violines, flautas, cellos y baterías reales, adosándolo a los típicos toques hard característicos de Ayreon, con lo cual se consigue un trabajo superador de los anteriores, en cuanto a balance de fuerza, lirismo y resultado final.

Sin contar además con el valor agregado de los grandes artistas convocados (como siempre) James LaBrie (Dream Theater), Mikael Akerfeldt (Opeth), Heather Findlay (Mostly Autumn), Oliver Wakeman, Martín Orford (IQ), por citar algunos, lo cual transforma a “The Human Equation” en un trabajo único, sin desperdicios o “rellenos” (a los que nos tienen  acostumbrados ciertos artistas para llenar 80 minutos de CD o más), y gran candidato a mejor disco del año.

Finalmente, para cerrar la obra aguarda un desenlace que une este trabajo con los anteriores de Ayreon (¿ficción o no?), pero lo dejamos para que los que disfruten el disco se sorprendan al final, si es que resisten en pie esta descomunal obra de arte.

Imprescindible

 

Gustavo Bolasini